martes, 28 de septiembre de 2010

El jardin de las flores secas. Septima entrega. Version 2

Capitulo 7
Con la nueva información que había obtenido sobre mi familia y sobre todas las cosas que habían pasado decidí después de unos mese volver a ver a Catalina, la extrañaba y además tenía la excusa perfecta para dejar el trabajo por unos días que era la siguiente: El baile del Gushtuñobe.
Este baile es una celebración que se hace cada año en la capital en la cual le rinden tributo a los ángeles inmortales, como yo. Yo nunca voy a esa reunión porque me parece una actitud muy aprovechada de parte de algunos inmortales que piensan que por ser lo que son se convierten en una raza de sangre pura, o algo parecido. Será interesante ir por una vez a una celebración como esa, me pregunto cómo reaccionaran al verme en ese lugar, de seguro quedaran sorprendidos.
Entre a mi habitación la noche antes del viaje y arregle mi maleta, esta vez un poco más grande porque me hiba a quedar en el castillo por mucho más tiempo porque la celebración del Gushtuñobe duraba en total una semana y media. Guarde en mi mochila mis implementos personales incluyendo mi reproductor de música y unas navajas de las cuales nunca me separaba, eran totalmente negras con unos diseños de serpientes dibujados en relieve en el mango.
De esa manera al siguiente día partí de regreso al castillo, esta vez el viaje fue mucho más corto porque sentía como mis piernas daban pasos más amplios y rápidos por la urgencia que tenia de verme con mi amada. Cuando llegue al castillo los de seguridad me reconocieron de inmediato y me dejaron entrar. Pase más o menos trotando todo el jardín que se extendía a mis pies hasta que llegue al salón del trono donde se encontraba la reina.
- Catalina.- Dije yo con una enorme sonrisa que me llegaba hasta las orejas, en cerio creo que me veía muy mariquita, o peor muy drogado. Ella avanzo rápido hacia mí y nos fundimos en un eterno abrazo, ahora nos sentíamos completos, se notaba en el ambiente cuanto nos amábamos y necesitábamos.- ¿Porque los de seguridad no me preguntaron tantas cosas como la anterior vez?- Pregunte mirándola tiernamente a los ojos.
- Les pedí que te dejaran entrar cuando vinieras, que no era necesario dejarte esperar a la entrada del castillo.- Ella se alzo un poco de puntillas aun en mis brazos y me beso con ternura, cerre mis ojos complacido por el beso que siempre teníamos. En mi rostro apareció una media sonrisa picara y la mira a los ojos.
- Te extrañe mucho Catalina, no puedo creer que tenga la oportunidad en este momento de estar de nuevo junto a ti.- Jugamos rozándonos las narices y haciéndonos cosquillas con nuestras puntas de los dedos.
- Yo también te extrañe mucho, por esa razón he preparado algo muy especial para nosotros esta noche.
- Solo me podría imaginar una cosa que yo podría hacer en las noches con una mujer hermosa.- Ella se sonrojo y al mismo tiempo se rio.
- Que horribles son tus pensamientos atrevido.- Dijo aun riéndose un poco.- Hablaba de algo más normal, como una cena a la luz de la luna, al aire libre, con velas, vista a un claro.
- Totalmente perfecto.- Dije yo susurrándole al oído sabiendo las reacciones que le daban a ella cuando hacia ese gesto. Nos quedamos un rato muy corto hablando y luego Cata me condujo hasta un dormitorio de huéspedes que era más grande que el dormitorio en el cual había estado la anterior vez, pero tenía la misma decoración que el anterior. Ella me dio tiempo para acomodarme en el lugar y me mostro donde nos reuniríamos aquella noche para celebrar mi llegada.
Guarde las cosas de mi maleta en el armario y luego me vestí con algo mas cómodo, una camiseta gris y unos pantalones negros que estaban un poco desgastados por lo viejo. Salí de mi habitación a las ocho de la noche y me dirigí hacia el jardín del frente del castillo donde me encontré (como me había dicho Catalina) con un laberinto de arboles en el cual yo me interne hasta que me llevo a un muy pequeño claro que estaba rodeado de variedades de flores, tenia rosas de todos los colores y también otras flores que no se me el nombre ni me importan, pero tengo que admitir que se veían muy geniales en ese lugar. En medio del pequeño claro se encontraba una mesa con dos asientos y unos platos llenos de comida, era langosta, no me acuerdo hace cuanto que no comía tan bien. En uno de los asientos se encontraba sentada Catalina que llevaba puesto un hermoso vestido color verde, muy simple pero que la hacía ver como una princesa sacada de un cuento de hadas. Me senté al frente de ella y le sonreí.
- Me hubieras avisado que esto era más formal, me hubiera vestido de una manera mucho más aceptable.- Catalina soltó unas risitas y sonrió dejando ver su hermosa dentadura totalmente blanca.
- No te dije nada porque sabía que no tenía caso. Con todo lo que te pones te vez sexy, es algo que me vuelve loca sobre ti.- Me sentí un poco incomodo por el cumplido pero al mismo tiempo feliz y confiado porque eso significaba de que ella me amaba. Bebí un poco de vino que estaba servido al frente del plato y me quede mirando los hermosos ojos azules de Catalina.- ¿Sabes que te amo? ¿No es cierto?- Me sorprendió un poco las preguntas que ella me había acabado de hacer y lo único que hice fue sonreírle levemente.
- ¿De qué hablas? Tú sabes que yo daría mi eternidad por ti, ¿no te acuerdas que una vez casi pago por amarte?- Ella bajo su mirada un poco llena de vergüenza pero de algo más que no alcanzaba a detectar por completo ¿Miedo? No lo ce.- ¿Qué te está pasando Catalina? Te noto más distante de lo normal, se que te pasa algo malo por tu comportamiento, te conozco.- Me quede inmóvil para que me dijera nada pero la única respuesta que obtuve por un tiempo fue el brillo de la luna con más intensidad que nunca que se reflejaba en los ojos de mi estrella.
- ¿Me prometerías que nunca me vas a dejar de amar?
- Ni aunque tú no me amaras, ni aunque por culpa de tus decisiones como reina destruyeras todo lo que más quiero. En este momento siento que el precio para tener tu amor es muy alto y que aun así lo pagaría, aunque fuera con el universo yo te lo entregaría en una cajita de plata.- La mire a los ojos preocupado por no saber qué era lo que estaba pasando.- Por favor, no estés callada y cuéntame. Te lo ruego, odio cuando me mantienen con la expectativa.- Duramos un gran rato en silencio, cruce como pude mis pies bajo la mesa y apoye mi cabeza sobre mi brazo. Trataba de averiguar que códigos tenía que descifrar de los que ella me estaba dando. Espere por un tiempo donde Catalina se la pasaba mirando las flores del jardín que estaban en su mejor estado hasta que se digno a hablarme aunque primero lo único que pudo hacer fue medio abrir sus hermosos labios carnosos.
- Grisel, creo que…. Creo que… que…- Se estaba trabando mucho y no me miraba a la cara. No creí que pudiera ser posible pero me preocupe aun más por mi preciosa Catalina. ¿Sera que me hiba a dejar por otro? No podía ser por las preguntas que me había formulado anteriormente ¿Pero entonces que sucedía? - ESTOY EMBARAZADA.- Dijo literalmente gritando y luego de lo nerviosa que estaba comenzó a respirar cortadamente y con mucho esfuerzo, note como su cuerpo temblaba y de su frente salían gotas de sudor. Yo no estaba asimilando la idea hasta que note que en realidad ella no estaba temblando, era yo el que estaba como una gelatina, y además ella no estaba sudando, solo que unas lagrimas en mis ojos la veían borrosa. No me pude mover del lugar en donde estaba. ¿Qué significaba lo que ella me estaba diciendo? ¿Qué estaba embarazada? ¿Qué significa eso? ¿De quién es el bebe?  Muchas preguntas estúpidas acudieron como un relámpago a mi mente la cual era la única que estaba reaccionando. ¿Hiba a ser padre? Cuando pude asimilar un poco esta nueva información sentí como de pronto mi corazón se golpeaba fuertemente contra mi pecho, pero no era de dolor ni de miedo, era algo mas completamente distinto. Era como… algo que nunca antes había sentido… ¿Felicidad? Si, era felicidad pero muy recargada por esa razón me sentía como si estuviera a punto de mutar en algo peor que mi figura de ángel.
- ¿Embarazada?- Pregunte yo tartamudeando. Sin poder evitarlo primero mis colmillos (Un poco más largos de lo normal y no quiero decir que soy un estúpido vampiro, simplemente tengo buena dentadura) se hicieron campo por mis labios hasta que todos mis dientes se pudieron ver. Creo que si alguien más estuviera en ese lugar diría que estaba abriendo la boca para comerme un sándwich gigante, cuando en realidad no cabía de la emoción. Me levante muy rápido y Catalina sorprendida levanto su mirada pero antes de que pudiera preguntar algo la abrace muy fuerte por los hombros pero luego mi abrazo fue más suave cuando recordé el porqué la abrazaba y me arrodille sin poder contenerme de la emoción: HIBA A SER PADRE.
- Grisel, tienes que calmarte, estas sudando y estas muy tenso, por favor tranquilízate.- Trate de hacerlo pero era como si me hubieran contado la mejor noticia de toda mi vida. Me sentía como si me hubieran contado que mi madre seguía viva- El bebe es tuyo, Grisel, estoy embarazada de ti, vamos a tener un hijo. Pues si tu quieres.
- ¿Qué si quiero criarlo? ¿Es que no vez mi expresión? ¡Catalina vamos a tener un maravilloso hijo!- Las palabras salían atropelladamente de mis labios, algunas creo que ni siquiera las pudo entender por la cara que hizo. Me agache un poco hasta que mi cara estuvo a la altura de su barriga que ya empezaba a agrandarse y la volví a abrazar. Ella con una sonrisa en sus labios de devolvió el abrazo, jugó con unos muy cortos mechones de mi cabello y me beso más de una vez la frente.
- Te amo Grisel.
- Yo también Catalina, y a ti también Junior.- Dije refiriéndome a la MUY pequeña pansa que le había salido (No sé a qué horas) a mi estrellita.
Estábamos allí hablando del tema cuando un guardia nos interrumpió a mitad de la noche diciendo que me buscaban: ¿Qué? ¿Quién tendrá el atrevimiento de buscar a alguien a media  noche? Me despedí momentáneamente de mi amada besándola en los labios y por el cuello y camine con paso decidido a las entradas del castillo donde un hombre alto y muy elegante me daba la espalda y miraba el jardín que se extendía alrededor del castillo.
- Buenas noches, ¿Quién es usted?- Le pregunte cortésmente pero con una gota de rabia por haberme separado de Catalina, el señor se volteo a mirarme y me dedico una escalofriante, pero natural, sonrisa.
- Hola Grisel, me contaron que te hospedabas aquí para poder ir a las celebraciones de el Gushtuñobe- Dijo el hombre que era en realidad nada más ni nada menos que el líder Stephan. De inmediato sentí como mis ojos quedaban como platos. ¿Qué carajos estaba haciendo él aquí?
- Stephan, que gusto encontrarte por aquí, si, tienes razón, me estaba quedando en este castillo para ir a las celebraciones, por fin me decidí a asistir a alguna, me gustaría saber cómo son.- Dije yo mintiéndole por completo. Él se dio cuenta de mi mentira y su sonrisa se volvió más grande.
- ¿Si? ¿Entonces porque no estás vestido adecuadamente para ir al festival? Porque si mal no recuerdo se celebra hoy.- Rayos, me atrapo con las manos en la masa.- ¿O es que en realidad estas casualmente en el castillo de la reina CATALINA por otro motivo?- Pregunto tratando de que el nombre de mi amor secreto sonara subrayado.
- De hecho no pensaba en irme de traje elegante, simplemente me hiba a ir de esta manera, de hecho ya me estaba dirigiendo a la salida.- Dije tratando de demostrarle que no podía estar conmigo porque ya me hiba.
- Oh. Qué casualidad porque yo también hiba directo al festival pero Sebastián me había contado que tú te habías venido al castillo para estar cerca de la celebración y así poder ir por primera vez. Entonces vamos juntos y hablamos de diversos temas. ¿O me estas engañando y en realidad no vas a ir a la plaza?- La última pregunta que formulo sonó como una advertencia, o peor, una amenaza porque su gesto había cambiado a uno totalmente serio y su mano apretaba mi hombro derecho. Trague saliva en seco, lo cual no lo hizo audible y tarde un poco en contestar.
- Claro que no me molesta líder, vamos.- Dije yo con un terrible sufrimiento en el alma, ¿Qué se supone que le hiba a decir a Catalina? La hiba a dejar sola después de semejante noticia, pero seguro que ella entendería porque si no hiba con el líder el podría sacarme para siempre de la base, o peor (por lo loco que era) podía culparme de traidor, no ce porque, no me pregunten, si quieren saber el porqué de su comportamiento pues pregúntenselo ustedes mismos. Cuando vean a un hombre alto de rasgos jóvenes pero de ojos viejos y marchitos vestido elegante de negro y con un enorme sombrero no duden en preguntarle por su actitud.
- Claro. Entonces vamos.- Su cara cambio a su natural sonrisa maliciosa y me empujo del brazo, casi arrastrándome a la salida.

Palabras de la autora: Creo que esta versión del capítulo es MUCHO MEJOR, si no les parece pues se pueden quedar con la otra versión del capítulo que les aseguro que no voy a borrar. Ahora que cambie un poco la historia se me hará más fácil sacar la novela adelante porque puedo inventarme más cosas. La verdad es que las cosas que yo hago funcionan si tienen que ver con amor, yo no puedo manejar en una historia estos sentimientos de decepción porque son los sentimientos más horribles de todos, la decepción en algunos casos es peor que la tristeza. Mañana tengo examen final de Física, por favor deséenme suerte, y si son religiosas recen por mi jajajaja. En cerio que necesitare ese apoyo porque cada vez que abro el cuaderno para estudiar me quedo dormida o me pongo a hacer cualquier otra cosa que no sea ver el cuaderno. (Lamento escribir todas estas cosas para las personas que solo les interesan la novela y no mi vida privada, lo entiendo, pero no se preocupen porque aquí voy a hablar de la novela):
Quiero recordarles que en el anterior libro ni Ald ni Hipólito murieron y les juro que (por haber dormido por fin ocho horas completas) pude inventarme un cuento súper interesante con eso, no se arrepentirán. Les digo un secreto: ¡No puedo aguantar por saber cómo será el hijo de Catalina y de Grisel! Estoy esperando a que la imagen de ese bebe salga en mi mente o que simplemente un día de desocupe comience a hacer garabatos y lo pueda dibujar.
Otra cosa que me gusta de este libro es que (Aunque suene aburrido) puede ser interminable porque es como toda la vida de estos personajes, aunque claro que en algún punto se tendrá que acabar la historia. Solo les puedo decir que cuando termine El jardín de las flores secas sacare otro blog, quizá con la opinión de Catalina o de otro personaje… Grx por el apoyo

domingo, 26 de septiembre de 2010

Palabras de la autora

Palabras de la autora: Quiero pedirles mis más sinceras disculpas por no haber publicado mas capítulos durante las anteriores semanas pero tienen que entender que esta semana comienzo exámenes finales, por favor les pido que no se molesten. Tambien pido perdon por la reaccion de Grisel ante el hecho de que el va a ser padre pero quiero como que mostrar el personaje con sumo detalle para mostrar que cada persona es un poco diferente en el fondo. Hace poco publique el octavo capitulo pero la vardad me parecio muy aburrido y por eso lo borre, carecia de sentido y de buena literatura, en dos palabras: MUY ABURRIDO. El que habia escrito se trataba de que Grisel fruto de su sesesperacion se hiba a un burdel y pasaban cosas que dañaban MUCHO la historia, creo que si ustedes leerian ese capitulo quedarian como ``OMG! NO VOLVERE A LEER ESTA NOVE SUPER FRACASADA´´ Tonz estoy pensando en PRIMERO: Volver a escribir el anterior capitulo unicamente cambiando por completo la actitud de Grisel por una como que mas emotiva y romantica y talvez en el octavo capitulo escribir como un obstaculo super importante que tendran que pasar ellos dos.SEGUNDO: Intentar que sucedan las cosas con mas lentitud para que tengan mas detalle de las sutuaciones de los personajes. PORFAVOR COMENTEN PORQUE NO SE QUE HACER, PORQUE SE QUE HASTA A MI NO ME GUSTO LA REACCION DE GRISEL FRENTE A SEMEJANTE NOTICIA. vuelvo a pedir perdon por no escribir los capitulos a tiempo pero necesito hacer otras obligaciones.
COMENTEN Y NO TENGAN MIEDO DE DECIR COMO LES GUSTARIA QUE FUERA LA ACTITUD DE EL SEXY DE GRISEL FRENTE A LA NOTICIA DE QUE CATALINA ESTA EMBARAZADA.
Tambien lamento un poquito no poder conectarme en MSN pero es por el estupido colegio que me tiene clavada en libros sin sentido para mi. GRX POR SEGUIR LEYENDO LA NOVE :)

El jardin de las flores secas. Septima entrega

Capitulo 7
Con la nueva información que había obtenido sobre mi familia y sobre todas las cosas que habían pasado decidí después de unos mese volver a ver a Catalina, la extrañaba y además tenía la excusa perfecta para dejar el trabajo por unos días que era la siguiente: El baile del Gushtuñobe.
Este baile es una celebración que se hace cada año en la capital en la cual le rinden tributo a los ángeles inmortales, como yo. Yo nunca voy a esa reunión porque me parece una actitud muy aprovechada de parte de algunos inmortales que piensan que por ser lo que son se convierten en una raza de sangre pura, o algo parecido. Será interesante ir por una vez a una celebración como esa, me pregunto cómo reaccionaran al verme en ese lugar, de seguro quedaran sorprendidos.
Entre a mi habitación la noche antes del viaje y arregle mi maleta, esta vez un poco más grande porque me hiba a quedar en el castillo por mucho más tiempo porque la celebración del Gushtuñobe duraba en total una semana y media. Guarde en mi mochila mis implementos personales incluyendo mi reproductor de música y unas navajas de las cuales nunca me separaba, eran totalmente negras con unos diseños de serpientes dibujados en relieve en el mango.
De esa manera al siguiente día partí de regreso al castillo, esta vez el viaje fue mucho más corto porque sentía como mis piernas daban pasos más amplios y rápidos por la urgencia que tenia de verme con mi amada. Cuando llegue al castillo los de seguridad me reconocieron de inmediato y me dejaron entrar. Pase más o menos trotando todo el jardín que se extendía a mis pies hasta que llegue al salón del trono donde se encontraba la reina.
- Catalina.- Dije yo con una enorme sonrisa que me llegaba hasta las orejas, en cerio creo que me veía muy mariquita, o peor muy drogado. Ella avanzo rápido hacia mí y nos fundimos en un eterno abrazo, ahora nos sentíamos completos, se notaba en el ambiente cuanto nos amábamos y necesitábamos.- ¿Porque los de seguridad no me preguntaron tantas cosas como la anterior vez?- Pregunte mirándola tiernamente a los ojos.
- Les pedí que te dejaran entrar cuando vinieras, que no era necesario dejarte esperar a la entrada del castillo.- Ella se alzo un poco de puntillas aun en mis brazos y me beso con ternura, cerre mis ojos complacido por el beso que siempre teníamos. En mi rostro apareció una media sonrisa picara y la mira a los ojos.
- Te extrañe mucho Catalina, no puedo creer que tenga la oportunidad en este momento de estar de nuevo junto a ti.- Jugamos rozándonos las narices y haciéndonos cosquillas con nuestras puntas de los dedos.
- Yo también te extrañe mucho, por esa razón he preparado algo muy especial para nosotros esta noche.
- Solo me podría imaginar una cosa que yo podría hacer en las noches con una mujer hermosa.- Ella se sonrojo y al mismo tiempo se rio.
- Que horribles son tus pensamientos atrevido.- Dijo aun riéndose un poco.- Hablaba de algo más normal, como una cena a la luz de la luna, al aire libre, con velas, vista a un claro.
- Totalmente perfecto.- Dije yo susurrándole al oído sabiendo las reacciones que le daban a ella cuando hacia ese gesto. Nos quedamos un rato muy corto hablando y luego Cata me condujo hasta un dormitorio de huéspedes que era más grande que el dormitorio en el cual había estado la anterior vez, pero tenía la misma decoración que el anterior. Ella me dio tiempo para acomodarme en el lugar y me mostro donde nos reuniríamos aquella noche para celebrar mi llegada.
Guarde las cosas de mi maleta en el armario y luego me vestí con algo mas cómodo, una camiseta gris y unos pantalones negros que estaban un poco desgastados por lo viejo. Salí de mi habitación a las ocho de la noche y me dirigí hacia el jardín del frente del castillo donde me encontré (como me había dicho Catalina) con un laberinto de arboles en el cual yo me interne hasta que me llevo a un muy pequeño claro que estaba rodeado de variedades de flores, tenia rosas de todos los colores y también otras flores que no se me el nombre ni me importan, pero tengo que admitir que se veían muy geniales en ese lugar. En medio del pequeño claro se encontraba una mesa con dos asientos y unos platos llenos de comida, era langosta, no me acuerdo hace cuanto que no comía tan bien. En uno de los asientos se encontraba sentada Catalina que llevaba puesto un hermoso vestido color verde, muy simple pero que la hacía ver como una princesa sacada de un cuento de hadas. Me senté al frente de ella y le sonreí.
- Me hubieras avisado que esto era más formal, me hubiera vestido de una manera mucho más aceptable.- Catalina soltó unas risitas y sonrió dejando ver su hermosa dentadura totalmente blanca.
- No te dije nada porque sabía que no tenía caso. Con todo lo que te pones te vez sexy, es algo que me vuelve loca sobre ti.- Me sentí un poco incomodo por el cumplido pero al mismo tiempo feliz y confiado porque eso significaba de que ella me amaba. Bebí un poco de vino que estaba servido al frente del plato y me quede mirando los hermosos ojos azules de Catalina.- ¿Sabes que te amo? ¿No es cierto?- Me sorprendió un poco las preguntas que ella me había acabado de hacer y lo único que hice fue sonreírle levemente.
- ¿De qué hablas? Tú sabes que yo daría mi eternidad por ti, ¿no te acuerdas que una vez casi pago por amarte?- Ella bajo su mirada un poco llena de vergüenza pero de algo más que no alcanzaba a detectar por completo ¿Miedo? No lo ce.- ¿Qué te está pasando Catalina? Te noto más distante de lo normal, se que te pasa algo malo por tu comportamiento, te conozco.
- ¿Me prometerías que nunca me vas a dejar de amar?
- Ni aunque tú no me amaras, ni aunque por culpa de tus decisiones como reina destruyeras todo lo que más quiero. En este momento siento que el precio para tener tu amor es muy alto y que aun así lo pagaría, aunque fuera con el universo yo te lo entregaría en una cajita de plata.- La mire a los ojos preocupado por no saber qué era lo que estaba pasando.- Por favor, no estés callada y cuéntame. Te lo ruego, odio cuando me mantienen con la expectativa.- Duramos un gran rato en silencio hasta que ella se digno a hablarme.
- Grisel, creo que…. Creo que… que…- Se estaba trabando mucho y no me miraba a la cara.- ESTOY EMBARAZADA.- Dijo literalmente gritando y luego de lo nerviosa que estaba comenzó a respirar cortadamente y con mucho esfuerzo, note como su cuerpo temblaba y de su frente salían gotas de sudor. Yo no estaba asimilando la idea hasta que note que en realidad ella no estaba temblando, era yo el que estaba como una gelatina, y además ella no estaba sudando, solo que unas lagrimas en mis ojos la veían borrosa. No me pude mover del lugar en donde estaba. ¿Qué significaba lo que ella me estaba diciendo? ¿Qué estaba embarazada? ¿Qué significa eso? ¿De quién es el bebe?  Muchas preguntas estúpidas acudieron como un relámpago a mi mente la cual era la única que estaba reaccionando pero solo me estaba llenando de dudas y de pesos de más. No podía hablar, no podía hacer nada, era como si el mundo se hubiera detenido y que esta vez yo no fuera el que estuviera detenido en el tiempo por ser inmortal, sino que el tiempo estuviera detenido por mi propia mente.
- ¿Embarazada?- Pregunte yo tartamudeando. No podía ser que me estuviera pasando esto a mi después de haber pasado muchos años en el colegio donde todos los malditos años nos hablaban de el tema de protección en el sexo y etc.… aun era muy joven para tener a un niño, yo no podía mantener algo así de pequeño, ¡son seres que piensan! - ¿De quién?- Fue la primera pregunta más estúpida que pude haber formulado en toda mi vida.
- Grisel, tienes que calmarte, estas sudando y estas muy tenso, por favor tranquilízate.- Trate de hacerlo pero era como si me hubieran lanzado agua tan fría que me hubiera congelado con ella.- El bebe es tuyo, Grisel, estoy embarazada de ti, vamos a tener un hijo. Pues si tu quieres.
- Yo… yo tengo que pensar… Catalina, discúlpame pero necesito espacio.- Dije yo retirándome del lugar lo más rápido que pude y encerrándome en mi habitación. Sin saber que hacer me recosté en mi cama y me tape con las cobijas deseando que lo que había pasado minutos antes se borrara de mi mente. Yo no podía tener un hijo, simplemente no estaba preparado para semejante responsabilidad, todo hiba a tornarse horrible después de que ese demonio naciera, tendría que esperar 18 años para poder tener de nuevo un minuto a solas con mi amada, ese bebe le hiba a quitar toda la atención de Catalina que tenía en mi. No más abrazos seguidos ni muestras de cariño. Todo se hiba a volver ruinas sin poder si quiera evitarlo.
Pensando todas estas estupideces me quede dormido de lo cansado que me encontraba, pero me desperté como tres horas después, era como media noche cuando abrí mis ojos un poco desorientado. Me encontraba aun con la camiseta gris y el pantalón negro. Me senté pensando en todo lo que había pasado y me di cuenta de que había actuado como un perfecto idiota. Lo que restaba de esa noche no pude dormir, me la pase pensando en toda la revelación que me había dicho Catalina. A las 11 de la mañana decidí salir de allí y disculparme por mi actitud a Catalina, porque yo no había regresado a la cena para hablar con ella. Camine por los pasillos desiertos y llegue más rápido de lo que quería a la sala del trono. Cuando entre vi a Catalina sentada al lado de una ventana mirando a la nada, de repente descubrí como una lagrima resbalaba por su mejilla y me acerque corriendo a ella.
- No llores amor mío que me lastimas el corazón a mí. Todo esto es mi culpa, lo lamento.- Le seque la lagrima con mis dedos y la bese.
- No, todo fue culpa mía, fui muy irresponsable, además tienes todo el derecho a decir que no quieres ser su padre, te entiendo perfectamente.- Nos abrazamos muy fuerte.
- Claro que no fue tu culpa. El único problema que hay en este momento es mi forma de actuar, actué como un estúpido pero tienes que entender que nunca pensé que hiba a pasar esto.- De repente vino a mi memoria la imagen que me había creado de una hija mía con Catalina y los ojos se me llenaron de lagrimas por el miedo. Creo que esta etapa fue la más difícil que he tenido en mi vida entera.

viernes, 17 de septiembre de 2010

El jardin de las flores secas. Sexta entrega.

Capitulo 6
Nos quedamos un rato hablando hasta que decidí que me tenía que ir de allí cuanto antes porque me iban a reprender en la base, nos despedimos con un suave beso que me calentó la sangre que corría en ese momento por mis venas y atravesé el jardín del castillo hasta llegar a la salida, yo no gire a ver por última vez el castillo porque sabía que esa no iba a ser la última vez que lo hiba a ver, allí mismo mientras que caminaba con la cabeza en alto y mirando al frente le prometí a mi estrella que la volvería a ver muy pronto aunque no sabía cuándo.
El viaje fue muy largo y pesado, llegue por fin a la base después de un par de horas y lo primero que hice fue dirigirme hacia mi lugar de trabajo donde se encontraba Sebastián mirando unos archivos nuevos. Me senté en mi escritorio y me quede pensando por un momento en Catalina.
- Yo sabía que tarde o temprano la ibas a visitar.- Dijo el sin mirarme y tratando un poco de provocarme pero yo no hice caso a lo que él decía, en vez de eso me quede callado esperando a que dijera algo mas.- Te sigo insistiendo de que deberías de leer la carta que escribió Ald, además que esta seria tu última oportunidad porque mañana se llevan todos esos archivos a alta seguridad, no seas tonto y aprovecha, Talvez saques algo muy bueno de eso.
Rayos, tenía que recordarme de nuevo esa estúpida carta, sencillamente yo no quería leerla, pensaba que las cosas como estaban en ese momento iban perfectamente bien. Pero aunque con mi alma deseaba quemar esa carta para que nadie más me hablara de ella mi curiosidad venció todo lo que sentía y busque la carta donde siempre la guardaba Sebastián y claramente la encontré. Mi mano sintió una hoja amarillenta y muy arrugada en la cual habían escrito algo tan fuerte que se podían sentir las letras de la carta. Estaba un poco asustado por no saber que hiba a encontrar escrito en ese pedazo de papel, todo podría cambiar para siempre, o Talvez no.
Querida mía:



Una lástima total que no hayas venido a la fiesta que organizamos para tus padres, la muerte es un castigo para algunos, para otros un regalo, y para muchos un favor. Te preguntaras el porqué de la situación y el quien la hizo y te prometo que te puedo responder las dos juntas en este pedazo de papel. Te aseguramos que ya sabemos que eres tú la heredera al trono y la verdad es que no dejaremos de perseguirte hasta que nos lo entregues. No creas que es algo personal, simplemente es algo que nosotros queremos y que tu nos serias de gran ayuda para conseguirlo.



Una nueva era a comenzado, nuestro oráculo ha hablado y el de ustedes también pero ustedes no saben escuchar. En unos meses nos reuniremos para crear la guerra definitiva. ``No hay quien se esconda de la guerra definitiva, todos seguirán un camino que los llevara a ese lugar. No está marcado el día ni la hora ni el lugar, no se preocupen que los dioses se encargaran de eso. Ustedes sabrán cuando y donde es cuando ya estén llegando allí. Solo uno vencerá, el ganador será recibido con vida de los dioses, el perdedor estará en una condena interminable por siglos hasta que deje de ser de utilidad. Esta es la nueva profecía donde los dos mundos sucumbirán.´´
Termine de leer la carta y no pude creer que existiera esa profecía, ni mucho menos que todos me la estaban ocultando durante tanto tiempo. Me imagine por un momento la situación de Catalina en ese instante y entendí cuanto había sufrido en esos momentos, saber que te asignaron una guerra en la cual nunca vas a estar preparado y que no sabes diferenciar el bien del mal. Increíble. Me quede callado por un momento mientras asimilaba la idea de que había leído una horrible carta que hablaba sobre la muerte de los padres de Catalina cuando ella era mucho más joven.
- Te dije que lo mejor era que leyeras la carta.- Dijo Sebastián girando su mirada y clavándola en mi rostro pálido.
- Nunca pensé que era tan importante, en esos momentos ustedes debieron de pasar días tratando de descifrar lo que decía para saber cuándo y que significaba esa guerra, pero ahora que paso ya no se qué creer… ¿Qué tipo de dioses existen para nosotros?
- La raza del sur y la del norte tienen dioses diferentes. Nosotros, los ángeles tenemos 2 dioses, en cambio los del sur solo tienen uno. Claro que no sabes nada de eso porque ahora esas religiones nadie las ve, ahora son historia antigua para todos. Es increíble como transcurren los años y de un momento a otro notas como los niños más pequeños no tienen ni idea que es un dios, en verdad es increíble.- Me quede esperando a que dijera algo mas porque parecía como si lo que fuera a contar iba a ser una historia muy interesante.
- Continua por favor.
- Esta bien.- Dijo Sebastián acomodándose hasta que quedo mirándome a mí y dejando todo lo que estaba haciendo sobre su escritorio.- Como tú sabes, solo hay muy pocos seres que fueron tocados por los mismísimos dioses, están los líderes del norte y unos pocos del sur, estamos tu y yo condenados a vivir por siempre, solo que tu tuviste la suerte de que te dieron el poder a un joven, a mi me lo asignaron viejo, por eso es que ya no atraigo a ninguna chica.- Nos reímos.- Estas pocas personas que fueron tocadas con la energía más pura que existe en el universo se convirtieron en inmortales gracias a dos dioses, te contare toda la historia…
Prov. Sebastián. Milenios atrás.
Aunque era viejo mis huesos aun funcionaban perfectamente, por esa razón no me molestaba ir a comprar la comida ni ropa para mi familia. Esa mañana me había despertado y me había vestido con mi ropa más elegante para asombrar a los de alta clase que iban a estar presentes en la reunión del mercado, quizá encontraba a alguien para que me diera un empleo. Camine por mis tierras para poder llegar hasta la calle FBG la cual hiba directo a la plaza de ventas pero justo cuando estaba tocando con mi pie derecho la calle algo me aplasto, fue una fuerza enorme que lastimo todos mis órganos internos y mis huesos que por el momento habían estado en buen estado pero ahora de ellos solo quedaban astillas. Yo no me moví, no solo porque no podía sino porque yo sabía que era lo que estaba pasando: Un dios estaba pasando encima de mí. Me quede inmóvil esperando sentir lo que de muchos había escuchado hablar, todos en el lugar decían que los dioses estaban otorgando poderes magníficos y que se sentía como la mejor paz que pudiera existir en el mundo. Espere y espere pero me di cuenta que solo sentía dolor porque el dios me había caído encima, sin saber que hacer abrí mis ojos y me encontré con algo espectacular, encima mío se encontraba un enorme tornado que de pronto con el viento formo una cara que me parecía desconocida y me daba miedo y al mismo tiempo un tipo de esperanza. La cara me sonrió con dulzura y de repente sentí como una corriente de electricidad recorría todo mi cuerpo y lo reparaba, primero fue muy fuerte e intensa pero luego fue lo más hermoso que algún humano pudo haber sentido en toda su vida. Cuando deje de sentir todas esas cosas me levante y note como mi cuerpo estaba en perfecto estado y lo único que hice fue sonreír porque un dios me había elegido solo a mí para recibir un poder único y especial. Me alegre de que yo hubiera sido tocado por un dios y no por una maquina porque en esos tiempos habían rumores que los del sur como no eran bendecidos con ese tipo de poderes se habían inventado un modo de convertirse en inmortales. Corrí hacia la plaza para buscar a mi gran amigo de ventas y me lo encontré en el mismo puesto de comidas donde siempre estaba. Nunca supe su nombre pero si su historia, el había sido un muy importante militar y en esos momentos era alguien de muy alto rango y tenía confianza del rey.
- No creerás lo que ha pasado amigo mío.- Dije yo muy emocionado pero hablando en susurros para que nadie más se enterara de lo que me había pasado. Se lo conté todo como había sido y el lleno de júbilo (siempre fue un gran compañero) me invito a una cena en sus tierras la cual yo acepte con gusto. Llegamos a sus tierras un par de horas después y me presento con su hermosa esposa que tenia ojos grises con cabello largo y rubio. Ella era muy hermosa. Luego mi amigo me presento a su único orgullo: Su hijo. Era un muchacho de corta edad que tenía los ojos de su madre y el cabello oscuro de su padre, según me dijeron tenia por nombre Grisel. Este muchacho era fuerte como su padre, sabia todas las técnicas de combate y todas las mañanas entrenaba solo pero muy bien.
Esa noche después de la cena mi amigo y yo paseamos juntos bajo la impotente luna que se alzaba sobre todo el terreno.
- Grisel es un gran muchacho. Sé que le ira muy bien en su vida.- Dijo mi amigo con una nota de orgullo en su tono de voz.
- Grisel… Qué pena por ser tan entrometido pero me parece que usted me dijo que tenía dos hijos.- Dije yo con un tono de preocupación en mi voz por pensar en cómo reaccionaría.
- Es totalmente cierto, dos seres salieron de mi esposa pero uno solo fue el demonio encarnado. Mi segundo hijo se llama Hipólito, es un rebelde, un monstro sin remedio.
Esa noche averigüe la historia más horrible que pude haber escuchado en mi vida y escuche como un padre luchador se daba cuenta de que uno de sus hijos lo único que quería era poder y matar a toda la raza del norte. Una historia en verdad escalofriante.
Unos años después por cosas del destino un dios se topo con Grisel, el en ese momento ya era un hombre pero por toda la perdida de cultura y religión que había el casi no supo que era lo que le estaba pasando pero yo le explique todo lo que debía de saber en los próximos siglos. Cuando su padre se entero que su hijo le había pasado esa bendición el estaba en medio de una guerra y recibí una carta de su parte diciendo que cuidara como pudiera a su hijo mayor: Grisel y que no dejara nunca que le pasara algo malo, que le consiguiera una mujer para que siempre estuviera a su lado y que me convirtiera en el padre que nunca fui y que él no hiba a tener por más tiempo porque el padre de Grisel sabía que esa noche el se hiba a morir porque los superaban en número y en armas. Yo apoye a este chico por mucho tiempo mientras que su hermano muerto de celos trato de generar la potencia de los dioses para que él se volviera inmortal, también creo la guerra entre la raza del sur y del norte y lidero diversos ataques hacia la familia imperial. Cuando Hipólito estaba a punto de morir logro activar la maquina y de alguna manera horrorosa y sobre natural consiguió tanto poder que su alma se transformo en inmortal. Esa fue noticia en todo el mundo y muchas familias muertas de miedo porque sabían el potencial de ese monstro se encerraron por semanas en sus casas hasta que se dieron cuenta que lo único que quería ese hombre era una guerra con el trono.
La batalla fue increíble, a nadie nunca se le va a olvidar ese suceso tan importante e impresionante. Lo mejor de toda la cosa fue que todos los ángeles sabíamos que íbamos a ganar porque ese monstro estaba cegado por la ira y por sus emociones.
Ahora trabajo en la base donde puedo vivir en paz, ya hice todo lo que quería hacer en mi vida y aun podre hacer muchas más cosas si es que los humanos o los ángeles se inventan algo nuevo, algunos dirían que la eternidad torna a ser aburrida pero yo no opino eso porque aunque haya vivido muchas cosas me doy cuenta que cada día aprendo algo nuevo, que cada día este muchacho, Grisel me enseña cosas sobre los humanos, me hace sentir como un adolecente de nuevo, queriendo ir a fiestas y cosas por el estilo pero mediante que el tiempo pasa en sus ojos crece la madures, tiene aspecto de joven pero si ves profundamente en sus pupilas podrás notar por todo lo que ha pasado. La vida tiene maneras muy extrañas de actuar pero creo que es por eso que todos nosotros existimos en el universo, para buscar el significado de la vida aunque en este momento veo imposible saber que significa porque he vivido demasiado tiempo y aun no se qué significa todo esto ¿Por qué tenemos que seguir viviendo de la misma manera monótona?
Recuerdo todas las historias fantásticas que me decían mis profesores cuando yo era menor sobre nuestros dioses, los grandes y poderosos dioses los cuales no deberían de ser molestados. Escribiré cuales eran los dioses, o cuales son, y ustedes podrán juzgar en su mente si son reales o no pero eso no me importara porque son mis creencias no las suyas.
1.       La diosa Ivonne: La más hermosa de todas las diosas del universo, llena de paz, libertad y amor. A ella se le pregunta sobre pasado, presente y futuro, sobre los hijos, familias y amigos y sobre el amor. Ella nos cuida en las noches con su manto protector brillante que le muestra el camino a los hombres y mujeres que se mueven por la noche. Es fanática de la danza, música y belleza, en tiempos antiguos se celebraba su día con distintos bailes que hacían las mujeres para ella. Ivonne representa la fertilidad, las mujeres le hablan cuando quieren tener un hijo y para que les ayude con él.
2.       El impotente dios Claust: El más poderoso de todos por su grandiosa fuerza y luz radiante, expresa posesión, fuerza, destreza y todo lo que tenga que ver con superioridad. Es el dios al cual los hombres le hablan sobre diversos temas los cuales son importantes para nosotros. El alumbra el planeta con su luz casi cegadora que nos deja ver los colores del mundo. El era adorado con oro y cosas de gran valor como tesoros únicos y también cosas de valor sentimental.
3.       El dios oscuro Ramphdon: dios de los de la raza del sur, protector de las pesadillas y de los malos deseos. Dueño de la oscuridad, de la flexibilidad, de la fuerza, de la sangre fría. Es representado con la imagen de una gigantesca serpiente con colmillos de 3 metros de largo. Le encanta que lo adoren con sacrificios, aunque esas prácticas fueron removidas hace pocos siglos al darse cuenta de que se estaban quedando sin soldados.
Estos son los dioses que existen, en los cuales los seres que viven aquí creen. No importa que los nuestro suenen buenos y los de ellos malos. En realidad eso nunca ha importado, antes aceptábamos las diversas culturas porque sabíamos que cada quien tenía derecho de pensar diferente. Convivíamos en paz hasta que llego Hipólito el cual lo destruyo todo.
Palabras de la autora: Lamento haber escrito después de tanto tiempo pero he tenido muchos trabajos que hacer, literalmente. Espero que este capítulo les haya gustado, a mi me pareció sumamente interesante porque en el podemos aprender más del personaje de Sebastián. Me gusta cómo se cuenta la historia de Grisel desde otra perspectiva.
El próximo capítulo va a ser narrado nuevamente por Grisel, como todo lo demás que he escrito, solo que este capítulo es especial.
Muchas gracias por apoyarme como lo están haciendo, son geniales y me motiva a seguir escribiendo. Y además les aseguro que la historia se está poniendo buena, muy emocionante e irresistible. Me encanta.

martes, 14 de septiembre de 2010

Contactos.

Se supone que yo iba a esperar hasta que se agotaran los dias para hacer la encuesta pero note como la mayoria estaba pidiendono me esto y pues si alguien no quiere pues simplemente no me hable.
para ser mas directa y para que ustedes entiendan lo que trato de decir lo resumire todo en unas palabras: CREE UNA CUENTA EN HOTMAIL PARA QUE ME ENVIEN MENSAJES PREGUNTANDOME COSAS SOBRE LA NOVELA O COSAS POR EL ESTILO. Me parece que muchas personas que apoyan este blog quieren de verdad poder intercambiar palabras con la autora y para ser franca a mi tambien me gustaria hablar con ustedes y poder saber cual es su punto de vista sobre la novela.
quiero dejar en claro unos puntos antes de escribir cual es la cuenta, porfavor leanlos con claridad y traten de aceptarlos si les parece algun punto dificil (aunque no creo):
1. EL HORARIO DE CHAT ES ESCLUSIVAMENTE HECHO PARA USTEDES, POR FAVOR NO INSULTARLO EN EL BLOG (si alguien quiere insultarme puede hacerlo por chat pero que ni se le ocurra escribirme insultos en mi blog porque ese espacio es para las personas que me siguen).
2. SOLO RESIVO QUEJAS, DISGUSTOS, ETCETERA. EN EL HORARIO DE CHAT O ENVIANDOME UN CORREO A LA CUENTA.
3. NO ESTEN MUY SEGUROS DE QUE LES VALLA A DECIR ALGUN ADELANTO DE LA HISTORIA PORQUE ME GUSTA MANTENERLOS CON LA ESPECTATIVA.
4. SI SOLO QUIEREN HABLAR CONMIGO COMO UNA AMIGA BIEN PUEDAN HACERLO, DE SEGURO QUE LES CAERE BIEN PORQUE SI LES GUSTA EL BLOG LES GUSTARE YO (``Uno es lo que escribe´´)
5. COMENTEN EN ESTE ESPACIO QUE HORARIO ES EL MAS FAVORABLE PARA TODOS MIS SEGUIDORES, TRATARE DE ELEGIR LA MEJOR OPCION Y SI ES NECESARIO CREARE DOS HORARIOS, UNO POR LA MAÑANA Y OTRO POR LA NOCHE (solo en dias especificos)
6. LES RUEGO QUE COMO USTEDES PIDIERON ESTE ESPACIO EN EL CUAL PODRAN HABLAR CONMIGO SE CONECTEN PORQUE TAMBIEN ES MUY TRISTE ESTAR MAS DE UNA HORA CONECTADA Y QUE NADIE MAS ESTE CONECTADO.
7. CREO QUE SI HAGO UN HORARIO POR LA MAÑANA SERIA LOS MIERCOLES DE 7:00AM A 8:00AM.SERIA EL UNICO ESPACIO POR LA MAÑANA QUE PUEDO TENER.
8. CUALQUIER INFORMACION NUEVA O ALGO POR EL ESTILO SOBRE LA CUANTA LA ESCRIBIRE EN UN CORREO ELECTRONICO A TODOS MIS CONTACTOS.
9. AUNQUE NO LO CREAN... ME PONE MUY FELIZ QUE USTEDES LES ENCANTE MI NOVELA HASTA AL TOPE QUE ME PIDIERON ESTE ESPACIO. MUCHAS GRACIAS A TODOS, JAJAJAJA CREO QUE VOY A LLORAR (porfavor no me llamen ilusa ni de ninguna manera porque solo es mi punto de vista.
10. (y ultimo) SOLO ESPERARE 35 MINUTOS CONECTADA Y SI NADIE SE CONECTA ME DESCONECTARE DE INMEDIATO, TIENEN QUE TENER MUY EN CUENTA QUE YO NO PUEDO ESTAR TODO EL DIA CONECTADA PORQUE TENGO CLASES Y TODO.


P.D: Lamento si hay errores de ortografia.

lunes, 13 de septiembre de 2010

Importante para muchas personas...

Aunque se que hoy es 13 de Septiembre y que debi de escribir esto hace dos dias quiero dar un mensaje para todos los que murieron el 11 de Septiembre en el 2001 en el atentado terrorista mas grande en la historia del mundo: La destruccion de las Torres Gemelas.




Queridos familiares victimas de esta tragedia que dio suceso hace ya nueve años no se olviden que desde aqui (aunque a pasado tanto tiempo) los apoyamos con todo lo que tenemos pues lo que ocurrio nunca se podra olvidar de ninguna mente en el universo. ¡VICTIMAS MUERTAS Y VIVAS DEL ATENTADO TERRORISTA DEL 11 DE SEPTIEMBRE DEL 2001, EL MUNDO ESTA CON USTEDES!







En la mañana del 11 de septiembre de 2001 (día conocido como 9/11 u 11-S), el grupo terrorista Al Qaeda secuestró dos Boeing 767 de American Airlines y United Airlines estrellándolos cada uno contra ambas torres, en un ataque suicida coordinado. Después de que ardiera durante 56 minutos, la torre sur (2) se derrumbó, seguida media hora más tarde por la torre norte (1). Con los ataques al World Trade Center murieron 2.602 personas (sin contar las que murieron en los aviones que se estrellaron contra las torres), que no pudieron salir de los edificios por la destrucción de los compartimientos de escaleras, que fueron destrozados por los aviones Boeing 767. Al caer las Torres Gemelas, los edificios aledaños (WTC 3, WTC 4, WTC 5 y WTC 6), fueron destruidos por la gran cantidad de material que cayó de los rascacielos a los techos y columnas de los edificios. Hacia las 5:20 de la tarde de aquel día, el WTC 7 se derrumbó como producto de los daños ocasionados por las torres derrumbadas esa mañana y de los fuegos en los primeros pisos del edificio, aunque en este último derrumbe no se produjeron víctimas, ya que la policía neoyorquina había evacuado todo el Bajo Manhattan durante el transcurso del día. Este atentado ha sido el peor de los desastres en Nueva York hasta la fecha. El proceso de limpieza y recuperación del sitio en donde se alzaban las Torres Gemelas y los demás edificios tomó ocho meses. En memoria a los ataques y a las cientos de personas fallecidas la Corporación de Desarrollo del Bajo Manhattan construyó un memorial en honor a las víctimas, el cual fue diseñado por Michael Arad. El sitio donde se alzaron las Torres Gemelas del World Trade Center es conocido popularmente como Zona cero (Ground Zero), y se ha convertido en punto de convergencia de turistas de todo el mundo.











P.D: Lamento si hay errores de ortografia

sábado, 11 de septiembre de 2010

hola: una pregunta:

¿Les gustaría que creara una cuenta de Hotmail y que asignara un horario en el cual yo estaría conectada y que ustedes, mis seguidores, pudieran hablar conmigo sobre cualquier cosa? Hagan la encuesta

viernes, 10 de septiembre de 2010

El jardin de las flores secas. Quinta entrega

Capitulo 5

Esa noche me quede en el castillo, pero no con Catalina, no piensen que tengo tanta suerte. Me asignaron una habitación de gran espacio y con una vista hacia toda la ciudad que estaba a los pies del castillo, desde allí podía visualizar la pequeña tienda de Claide que se veía como un montos de chatarra (por lo lejos que yo me encontraba del suelo). Esta habitación tenía una cama doble con cobijas rojas y tenía un elegante baño que se veía súper limpio.

Me moje la cara, como siempre me gustaba después de un día agotador, y decidí tratar de dormir un poco porque mañana tenía que regresar de nuevo a la base y el camino era un poco largo. Trate de que el sueño me llevara pero no pude ni siquiera cerrar mis parpados, me quede mirando la luna llena que se veía con todo su esplendor por la ventana. De pronto cuando me estaba dando cuenta que en realidad no podría dormir aquella noche escuche como abrían la puerta de mi habitación en casi un silencio absoluto. Pase mi mano a la navaja que siempre tenía guardada en mi cintura y cerré mis ojos para que apareciera como si yo estuviera dormido. Escuche pasos acercándose hacia la cabecera de mi cama, yo me quede totalmente inmóvil tratando de escuchar algo que me alertara sobre alguna arma de parte de la persona que había entrado (les explicare algo: A mí me habían entrenado en la base para defenderme de este tipo de situaciones porque como yo era uno de los pocos inmortales muchos, aunque no parece, me desean muerto. Dicen que es algo sobre humano y que yo no debería de ser así) pero lo único que escuche fue el sonido de una cremallera bajando, seguro que estaba sacando un arma de algún maletín, lo digo porque me ha pasado más de una vez. Luego escuche como algo caía al suelo con un sonido sordo y sentí como removían un poco las cobijas y alguien entrara en ellas. Me gire velozmente para atacar pero cuando mis ojos pudieron divisar al invasor lo que encontraron fue a Catalina muy próxima a mí y completamente desnuda. Me quede tieso por la sorpresa sobre lo que estaba pasando y no supe que hacer, aun mi daga la sostenía en el aire y mi mano estaba en posición de ataque pero mi cara había cambiado por completo. Trague saliva y sin poder evitarlo baje un poco mi mirada hacia su esplendoroso cuerpo bañado por la luz de la luna que se alcanzaba a colar por la ventana robándose nuestra intimidad. Catalina se acerco lo mas que pudo hacia mí y sentí como su cadera y sus senos me rosaban (por Dios, esto era mejor que cualquier cosa que un hombre pudiera tener). Aun yo no sabía cómo reaccionar así que ella con su mirada llena de amor se levanto un poco hasta quedar sobre mí y me desnudo, cuando desperté un poco y entendí que en realidad lo que estaba pasando no era un sueño la bese con una ternura infinita y luego con una fuerza que tenía como significado el poder de la pertenencia, ella me pertenecía, era mía, solo mía…

La abrace lo mas que pude y nuestros besos y carisias se tornaron salvajes, de desesperación que no alcanzaba a comprender por completo, me senté aun acariciándola y ella se sentó encima mío y pude sentir lo que sentía con mi amada cuando estábamos de esta forma en la cama, no solo era placer (si me permiten decir todas estas vulgaridades que estoy revelando), también era un deseo de no querer separarnos nunca más en toda la eternidad y un amor que nadie en el universo podía sentir como nosotros, pues nadie había pasado por las mismas circunstancias de terror. Mientras que nos amábamos lo único que le escuche decir por su parte fue apenas un leve susurro.

- Grisel, lamento todo. Te adoro.
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A la mañana siguiente cuando me desperté, aun con sudor en mi frente, note que me encontraba solo en la habitación, me volví a preguntar si todo lo que había pasado la anterior noche había sido solo un sueño pero luego me di cuenta que no podía ser, primero me encontraba completamente desnudo y con una sensación que no podría describir, y segundo la habitación estaba casi completamente destrozada. Sonreí por todo pues ella me correspondía a mi amor eterno y lo había demostrado de la forma más perfecta (para mí) que hubiera imaginado.

Me levante y camine al baño con un poco de cansancio. Sin detenerme para ver si había alguna toalla o no entre a la ducha y deje que el agua caliente resbalara por mi espalda y por mi cabello. Estuve allí por unos minutos y luego me seque con la toalla para manos y me vestí con la ropa que llevaba puesta el otro día, que en verdad era cómoda para el viaje que yo estaba haciendo.

Cuando ya estaba dejando la habitación note algo brillante debajo de una almohada y me acerque para ver que era y me encontré con un hermoso collar plateado con unos pequeños diamantes incrustados y con un dije que era en forma de una luna y detrás de él tenía el nombre marcado de Catalina, lo guarde en mi bolsillo para que no se perdiera y luego Salí de la habitación con una sonrisa de oreja a oreja hacia la sala del trono, cuando entre vi que Catalina (en su forma de ángel) se encontraba sentada comiendo una fruta que era de origen de este mundo que era de color purpura. Cuando ella me vio dejo la fruta y me abrazo demasiado fuerte, se notaba que aun no controlaba su fuerza en su forma de ángel.

- Hola, ¿Qué haces aquí tan sola?- Pregunte yo sonriéndole y besándola en la mejilla. Ella se ruborizo y me devolvió la sonrisa, me encantaba cuando le pasaba eso.

- Me obligan a estar aquí todo el día, tengo que esperar a que alguien venga y me pregunte de algo, se supone que la reina siempre debe de estar a disposición.- Ella lanzo un suspiro de cansancio y me acompaño a que me sentara junto a ella en unos asientos de madera que estaban en una esquina.- Lo peor es cuando espero todo el día aquí y nadie llega, literalmente me la paso encerrada en este lugar sin hacer nada, creo que llegara un momento en que no podre mas y explotare por tanta presión y al mismo tiempo aburricion.

Me imagine como seria vivir en un castillo y me pareció terrorífico, por esa razón Sebastián nunca me había dejado tomar el trono cuando se convirtió en mi tutor, en realidad le agradezco que no me hubiera dejado vivir en esta monotonía, de pronto se me ocurrió una brillante idea cuando vi un piano al otro lado del salón. Me levante sin decir nada y me senté frente al enorme piano.

- ¿Qué haces?- Pregunto Catalina un poco sorprendida por mi actitud y por no saber lo que yo iba a hacer. Coloque mis dedos sobre el teclado y me quede pensando por un tiempo si hacerlo o no.- ¡Ah! Yo no sabía que tu habías aprendido a tocar.- La mire a los ojos riéndome y le respondí.

- En realidad no se tocar, pero lo podría intentar.- Catalina mi miro con cara burlona y me hizo una seña divertida para que comenzara a tocar. Yo, como un loco trate de tocar una melodía que tanto me gustaba cuando era joven pero como todos estamos pensando en este momento fue un perfecto fracaso. Catalina se rio de lo mal que había tocado y yo también me reí un poco.- Creo que tengo una mejor idea.

- ¿Mucho mejor que esta? Espero.- Nos reímos como locos pero cuando pudimos parar de reír me acerque hacia ella y tome su mano derecha y con mi otra mano la cogí de la cintura.- ¿Qué haces?

- Viendo si por lo menos las clases de baile que tome dieron frutos.- Nos sonreímos y comenzamos a bailar, cuando menos lo pensaba yo estaba tarareando la canción que hace pocos minutos había intentado tocar en el piano y se escucho como quería que se escuchara: por lo menos aceptable.

Bailamos por un largo rato y en todo el baile nos comunicamos con los ojos, yo no podía creer lo espectacular que se veía con esos vestidos largos y con los hermosos peinados que le hacían y contemple su hermosura en cada detalle.

Cuando di por terminada mi canción nos detuvimos y nos quedamos quietos por un instante mirándonos a la cara, este momento parecía algo mágico, la verdad.

- Hermoso.- Dijo Catalina que se inclino a besarme el cuello y luego los labios.
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Palabras de la autora: Lamento si a alguien le pareció este capítulo un poco pesado o desagradable pero así es el libro. Espero que sigan leyendo el blog y que les encante como me paso a mí.

danni2304 y demas seguidores.

Dani: lamento los problemas que te he dado, debo admitir (como ya se habrán dado cuenta muchos) que no me va muy bien lo de ortografía, algunas veces yo manejo mejor la ``horro grafía´´.

Muchas gracias por corregirme este gran error, te aseguro que lo tendré muy en cuenta en los próximos capítulos que vaya a publicar, por favor si algún otro seguidor quiere preguntar cosas de este estilo y también sobre la historia les ruego que lo hagan.

Y, sobre la palabra AMORAL, la escribí de este modo por algo que me comento mi profesora de literatura: ¿En verdad no han pensado que la palabra IN, no se refiere como un término de dentro o entre? Me dio la idea que en realidad si lo piensan muy bien, la palabra no debería ser inmoral (porque se referiría a dentro de la moral) sino que amoral que es todo lo contrario.

Aunque como muchos estamos más acostumbrados a decir inmoral les aseguro que de ahora en adelante lo escribiré de la forma que dice Dani. Lamento mucho los inconvenientes que se dan en el blog pero apenas tengo 14 años, solo soy una bebe jajajaja :)

Repito: Muchas gracias danni2304

jueves, 9 de septiembre de 2010

El jardin de las flores secas. Cuarta entrega.

Capitulo 4

Claide y yo estuvimos un rato hablando sobre distintos temas que eran sobre autos, colegios, la vida en la Tierra y de mujeres.

- Ahora, dime porque has venido a este lugar. Yo sé muy bien que tu no vienes aquí por una razón cualquiera.- Dijo Claide entregándome un vaso con agua en el. Yo me quede un rato observando el agua disimulando mi asco hacia esta porque era de color amarillo, casi café.

- Tienes razón, yo vine aquí por una razón específica. Quisiera saber… ya que tu vives al lado del castillo… si…- No sabía pomo preguntarle esto sin reflejar sentimiento alguno, pero antes de que yo pudiera decir otra palabra él lo entendió todo.

- Quieres saber sobre la reina. Yo sabía que los rumores de su amorío eran totalmente ciertos.- Dijo el abriendo sus ojos de distinto color lo mas que podía.- Ella está muy bien, es en realidad hermosa, una rareza. Cuando la vi entrando al castillo con un vestido de la realeza me di cuenta en seguida que ella tenía algo humano. Algunas veces, cuando es tarde ella se convierte en la chica que siempre fue, pero todo el día se la pasa transformada en su forma de ángel. Es majestuosa en su trono de esa forma, uno se siente intimidado.

- Increíble. ¿Y a preguntado sobre mi?- Pregunte yo esperanzado de que ella me quisiera aun pero sabía que era muy poco probable.

- No, ella no ha preguntado por ti. Pero es porque ella piensa en ti como un fantasma, hasta yo creí que estabas mas muerto que las rocas. La reina se la pasa triste mirando hacia el horizonte y eso es causa de una herida en el amor, casi siempre cuando las personas miran de ese modo uno siente que fue por algo que trato de sus sentimientos.

Me quede pensando si ir o no al castillo para mostrarle a Catalina que yo estaba vivo y luego me imaginaba como los dos volvíamos a estar juntos por la eternidad y nos amaríamos y tendríamos hijos. Pero rápidamente retire todos esos pensamientos de mi cabeza, yo en realidad moría de deseo por verla pero ella estaba enamorada de alguien totalmente diferente a mí, seguro que yo nunca había sido su tipo.

- ¿Qué estas esperando?- Dijo Claide cogiéndome de los brazos y sacándome literalmente de la tienda a patadas. Cuando ya estaba afuera me tiro al suelo y grito mientras que cerraba la puerta del lugar.- ¡Ve a verla que es lo mejor! Ya verás que no te arrepentirás nunca de haber ido aunque pase lo peor. Y no vuelvas hasta que me traigas bebes que sean de ella.

Debo admitir que me sonroje un poco y me sentí muy incomodo con lo último que había dicho. Me imagine un hijo mío con las características de Catalina y las mías. Una niña pequeña de cabello rizado pero con mi oscuro color de cabello, unos ojos azules hermosos, la nariz de Catalina pero con la tez clara que tenía mi piel. Deje de pensar en eso y llevado por la emoción camine sin pensarlo hacia la entrada del enorme castillo donde se encontraban dos enormes guardias que custodiaban la entrada.

- ¿A quien desea ver?- Pregunto uno de ellos con una rudeza sobrenatural, mostré todo el valor que tuve en ese instante e hice como si no hubiera notado como me había hablado.

- A la reina.- Dije yo tratando de responder sus preguntas lo más puntual posible.

- ¿Quién es usted?

- Un caballero importante de la base que queda a las afueras.

- Nombre.

- Grisel.

- Edad- No supe que responder en ese momento y decidí decir que edad se supone que tendría por mi aspecto.

- 25 años.

Esos enormes ángeles por fin me dejaron pasar a el lugar y cuando pase las grandes paredes de la entrada me encontré con un jardín que estaba lleno de arboles altos y flores de varios colores, me impresiono lo mantenido que lo tenían. Entre en una habitación que me llevaba al trono de la reina y me quede un momento preguntándome si era lo correcto entrar y verla de nuevo sonriéndome. Pero decidí entrar y tomar por mi cuenta todas las consecuencias de ese encuentro.

Abrí las dos puertas de madera que me separaban de Catalina (físicamente) y lo primero que mis ojos encontraron fue una enorme sala donde solo se encontraban dos sillas (donde están ubicados los reyes) y en una de esas sillas se encontraba una mujer con un peinado muy bien elaborado y con un hermoso vestido azul que le lucia con sus ojos. Cuando nuestras miradas se encontraron se detuvo el tiempo, no podía creer que nos estuviéramos de frente de nuevo. Pasaron segundos, tal vez minutos, Talvez horas, no lo sé. Poco a poco la reina se levanto de su asiento y camino lentamente hacia mí pero se veía como si estuviera dudando de hacerlo o no. Cuando estuvo al frente mío yo me quede tieso sin saber qué hacer, ella giro a mí alrededor detallándome y luego, como si estuviera asegurando de que eso no era un sueño, con su delicada mano derecha me toco la mejilla.

- Escuche que un hombre venia a verme, que se hacía llamar Grisel y que aparentaba menos de 25 años. Me pareció que hiba a ver ante mis ojos un bufón de esos que mis admiradores tanto me envían pero cuando abriste esa puerta me lleve con la sorpresa de que no era haci. No era un bufón el que estaba buscándome, era un hombre, un hombre apuesto, de gran valor y de gran corazón. Pero al fin y al cabo un ladrón, pues tu cuando yo te necesitaba más te perdiste y te llevaste mi alma a la tumba. Fantasma, ¿Has regresado a atormentarme por mi comportamiento inaceptable, amoral?- Se forma de hablar había cambiado, lo notaba por un pequeño acento que mostraba todas las gruesas paredes que ella había creado rodeando su corazón de cristal para que nadie más lo dañara.

- Fantasma nunca he sido mi señora, pero si muerto en vida. Hace un tiempo que mis esperanzas depositadas en la persona que amaba desaparecieron. Quisiera poder tenerlas de nuevo pero no quisiera arrebatárselas porque yo quiero que usted, majestad, la siga conservando para que cuando fije su mirada en la luna de cada noche pueda encontrar en ella confianza y amor.- Trate de hablar como ella lo estaba haciendo conmigo aunque creo que me había salido un poco enredado porque, porque… en realidad lo que quería decirle es que LA AMABA y que quería seguir con ella hasta el final de todos los días.

- Creo que a los dos nos afecto un poco el cambio, aunque usted quiso que yo sintiera todo eso cuando por las noches miro la luna debo hacerle caer en cuenta que lo que sentía era soledad, enojo, tristeza y terror. Todas las noches es un tormento.- Ella ante mí se transformo en humana y debo admitir que estaba hermosa. De pronto radicalmente cambio su forma de hablar.- Pero creo que de esa forma me doy cuenta que estoy viva y que desaproveche la valiosa oportunidad de tener a alguien que me amara. Nunca me perdonare por haberte visto de esa manera, tu sangre escurría por mis manos y yo no sabía qué hacer, yo…

De pronto lágrimas resbalaron por sus mejillas, la vi como una niña pequeña que en realidad pretendía ser una mujer decisiva y orgullosa. Me acerque hacia ella sin poder soportar por más tiempo verla de ese modo y la abrace, ella me abrazo por la cintura y completamente desconsolada lloro todo el sufrimiento de una vida entera.

- Ahora, todo va a mejorar. Lo presiento.- Dije yo tratando de tranquilizar a mi bebe que me lloraba todo un rio. Nos quedamos haci por mucho tiempo en el cual ella no dejaba de lamentarse y de decirse palabras crueles. Yo sabía que ella había sufrido mucho por todo lo que había pasado y me di cuenta de que en realidad me seguía amando, este momento lleno mi corazón de paz y alegría. Creo que para ella todo esto era su condena pero yo trataba de hacerle creer que esto en ningún sentido había sido su culpa.

martes, 7 de septiembre de 2010

El jardin de las flores secas. Tercera entrega.

Capitulo 3

Llegamos al apartamento que había alquilado en esa ciudad pero no nos quedamos por mucho tiempo, primero Stephan envió su Ferrari al mundo de ángeles y luego nos transportamos los dos. Lo primero que vi ante mis ojos fue mi cama. Me encontraba completamente solo en mi habitación de la base. Esta habitación era una de las que más me gustaba porque no tenía esas luces de colores, era una habitación completamente normal. Paredes lisas color crema, un estante con mis CD y todas mis cosas desorganizadas y botadas sobre el suelo.

- Otra vez a la normalidad.- Susurre para mí solo. Tome un baño con agua caliente y luego escuche por horas la música que me gustaba mientras que organizaba un poco el lugar aunque sabía que no hiba a durar mucho organizado por ser yo el que vivía allí.

Al otro día me desperté cayendo de la cama. Me levante muy adolorido porque había caído sobre mis CD de electrónica que ahora se veían los pedazos de ellos por todo el suelo. Un poco desorientado camine hacia el baño (hice mis necesidades primero) y me moje la cara que estaba terrible por haber dormido tan mal. Me coloque una camiseta blanca y Salí del cuarto hacia el área 10 donde se guardaban cosas importantes como armas, documentos y ubicaciones de grupos de espectros. Entre a mi lugar de trabajo y me encontré con Sebastián, el antiguo ángel que aunque nunca había salido de la base había aprendido muchas cosas y por esta razón los ángeles mas jóvenes lo visitaban a preguntarle sobre diversos temas.

Cuando él me escucho entrar se giro a mirarme, juro que nunca olvidare su cara de sorpresa, era como si hubiera visto a un muerto viviente. El se levanto de su asiento tan rápido como pudo y me abrazo fuertemente haciendo tronar todos mis huesos.

- Es increíble que sigas vivo, no sabes por lo que nos hiciste pasar a todos los que te queremos.- Dijo él con sus manos en mis hombros y una sonrisa en su vieja cara.- Además, tú sabes que le prometí a tu padre que te protegería de todo.

- Claro, mi padre fantasma. Yo creo que tú eres mi padre real, ese hombre nunca estuvo en mi vida.

- Puede que no, pero siempre te quiso más que a cualquier cosa.- Yo suspire y me senté en mi escritorio (que estaba al lado del escritorio de Sebastián) y comencé a organizar documentos.

- Entonces, ¿Qué estabas haciendo antes de que yo llegara a molestarte?- Pregunte riéndome y él me respondió la risa y se sentó en su escritorio.

- Estaba revisando de nuevo la carta de Ald. La que encontramos cuando asesinaron a los padres humanos de la reina.- Fruncí el entre cejo y me pregunte porque esa estúpida carta era tan importante. Sebastián se dio cuenta de mi expresión y volteo a verme.- ¿Nunca leíste la carta?

- Nunca me dieron la oportunidad. Creo que era como si no me lo hubieran permitido.- Guarde los papeles de coordenadas que tenia encima de mi escritorio y me serví un poco de agua que estaba casi al lado.

- Deberías leerla, en realidad es muy interesante las cosas que escribe este enemigo en ella. Muy interesante. Y cuando quieras, puedes venir aquí y leerla, tú tienes las llaves de los cajones de estos archivos. Después de todo tu tienes todo el derecho de hacer lo que te plazca.

Lo pensé toda la tarde pero no me atreví a echarle un vistazo a ese pedazo de papel, quizá era mejor no saber nada de eso.

Al final de la tarde cuando termine mi trabajo (que era ordenar papeles, literalmente) decidí caminar afuera de la base. Cogí un saco de capucha oscuro y salí por la puerta principal, la hermosa luna me recibió con su luz. Camine hasta que encontré la capital (que no quedaba muy lejos) y anduve por las calles más solitarias, en realidad me encantaría describirles el odioso mundo en donde vivo. Es un muy pequeño mundo en el cual solo utilizamos la parte norte, aquí no tenemos grandes océanos pero si hermosos claros con ríos de los que siempre ponen en las escenas románticas de televisión (lo sé por las novelas que había tenido que ver en el hospital). Este mundo consistía en una base (donde yo trabajaba), una ciudad capital que era muy atrasada hablando de tecnología, muchos pueblitos donde los ángeles vivían y por ultimo un hermosos y grande castillo que se podía divisar sobre todas las cosas. Allá en el castillo vivían ángeles sumamente importantes como: ángeles de alto nivel social (con mucho dinero) y de grandes cargos como los reyes. En conclusión imaginen un mundo medieval pero con monstros que usan ropa del siglo XXI.

Camine por unos minutos hasta que llegue a las afueras del castillo donde entre a una tienda de baratijas la cual era de un hombre que había conocido hace mucho tiempo, fue el primer viaje que hicimos a la Tierra donde nos encontramos con él en un callejón, Sebastián decidió traerlo a este lugar y en realidad desde el primer momento que llego a este mundo se enamoro del lugar. Los líderes le permitieron quedarse con la única condición de no mezclarse con ningún ángel, lo que quiere decir que él nunca podrá tener hijos. Este hombre está dañado de la cabeza, ha vivido aquí 20 años, tiene los ojos saltones cada uno de diferente color. Es de estatura baja y es muy delgado.

Cuando entre a la tienda desordenada me encontré con Claide (el hombre loco) creando una vasija de vidrio.

- Hola Claide.- Dije yo tratando de no pisar ninguna de las cosas tiradas en el suelo.

- ¡Jefe Grisel!

lunes, 6 de septiembre de 2010

El jardin de las flores secas. Segunda entrega

Capitulo 2

De esta manera (después de despertar) mi cuerpo funciono como nuevo al otro día en el hospital. Era como si mi cuerpo entero funcionara pero que mi ser hacia que no reaccionara, en realidad me sentía completamente decepcionado y deprimido. En primer lugar la única persona a la que amaba en mi eternidad me había decepcionado profundamente, la daga de mi mejor amiga me había atravesado mi corazón que en este momento no se movía.

El doctor decidió darme mas días en el hospital en los cuales no comí, hable, ni moví un musculo, simplemente veía estúpidas novelas para mujeres donde dos personas se enamoraban pero terminaban descubriendo que eran parientes (en mi opinión una historia muy exagerada y reforzada).

Cuando paso la semana decidieron darme el alta y el último día en ese hospital recibí un florero con una tarjeta que decía: El hospital San Luis te desea un buen viaje. Deje el regalo en la mesa pequeña de madera (que habían pintado de blanco) y me arregle para largarme de ese odioso lugar, lo que más deseaba en ese momento era volver a ver otro color que no fuera blanco, verde y negro (hasta el televisor transmitía a blanco y negro).

Me limpie el cabello lo más que pude y me vestí con una camisa negra que mi instructor de guerra me había regalado en uno de los tantos cumpleaños que me habían celebrado y unos jeans oscuros. Me peine muy corto cabello hacia atrás y Salí de la habitación con paso despreocupado. Note un par de miradas de unas chicas hacia mi (que en realidad ellas estaban lo que se puede decir ``muy buenas´´), no lo pude evitar y para divertirme un poco sonreí hacia ellas y se sonrojaron. Los mortales eran muy predecibles.

Como pensaba, al salir del hospital, me encontré con un auto último modelo Ferrari que me esperaba, dentro, al frente del volante se encontraba Stephan. El vestía con un elegante traje oscuro y de corbata, si no lo conociera diría que tendría unos 30 años aproximadamente. Entre en el auto y este arranco con un rugido al instante.

- ¿Te gusta lucirte no?- Exclame yo mientras el viento revolvía mi cabello.

- jajajajaja. Esa es toda mi intención, después de todo en nuestro mundo no se utiliza mucho. Prefiero aprovechar la oportunidad de venir aquí. Mira en el suelo, te compre un nuevo traje.- Yo sonreí agradecido y coloque el traje sobre mis piernas aunque era casi imposible que yo lo usara, en realidad eran demasiado incómodos.

- Después de todo el líder de todos los ángeles merece lo mejor ¿No?- Los dos reímos.

- Te equivocas chico, el segundo líder. Catalina, después de la guerra, se presento como líder de todos y tomo el mando de su reinado.

Catalina. Cuanto la extrañaba y cuanto me dolía recordar su cabello cayendo por su espalda (cabello castaño medio oscuro que era rizado pero en las puntas caía un poco ondulado y con la luz del sol al amanecer se notaban pequeños cabellos más claros que otros), sus hermosos ojos azules que me hacían llegar a un mar donde habitaban todos los dioses, y sobre todo sus labios carnosos que devoraban los míos y…

- Chico, despierta. Si supiera que ibas a reaccionar de ese modo con la mención de la reina ni hubiera tenido algún pensamiento en ella. Es tiempo de superarlo Grisel. Yo siempre supe que ella te estaba traicionando.- Desperté de mi colapso momentáneo y voltee mi mirada a los ojos del líder, Stephan.

- ¿Si? ¿Y porque nunca me advertiste? Ojala no la hubiera conocido nunca. Pero bueno, haci son todas las mujeres. Las ignoras y te quieren. Les entregas tu vida y te dejan por otro que no les hace ningún bien.- Quedamos un momento en silencio hasta que me canse.- ¿Ella sabe que estoy vivo?

- No, ella piensa que estas en la morgue de la base, hasta nosotros pensamos que de un momento a otro te teníamos que enterrar, en cerio eres al único que una espada enorme no le atraviesa ningún órgano vital, tienes mucha suerte. En realidad ella no ha querido decir nada, simplemente acepto el reino y la verdad es que sus mandatos han favorecido mucho al mundo. Ella mando a crear un monumento a los caídos en la guerra. Quedo increíble.

- Tantas cosas y tan poco tiempo.- Suspire cansado de pensar en todo lo que había pasado y no sabia y decidí descansar un poco en el viaje de vuelta a casa.

domingo, 5 de septiembre de 2010

El jardin de las flores secas. Primera entrega

Capitulo 1


Sentía mi cuerpo flotando en el vacío, como si mi alma estuviera viajando por todo el universo sin un punto fijo donde ir. Solo había experimentado este sentimiento una sola vez en mi larga vida. Este sentimiento de paz, tranquilidad, pureza y fuerza. Escuchó algo a mi lado, muchas voces a la vez que discuten y sin saber porque noto que es sobre mí. Trato de levantarme pero estoy muy agotado para siquiera abrir mis ojos. Mis parpados son muy pesados pero sigo intentando hasta que me di cuenta que en verdad era inútil tratar. No escucho a nadie más a mí alrededor, estoy nuevamente solo. Recuerdo pocas cosas de lo sucedido pero las que olvide son de poca importancia, mis pensamientos solo me traen las imágenes de dolor y en ellas me guio hasta poder sacar una conclusión para saber donde estoy y como acabe en este lugar. Escucho a alguien entrando de nuevo al lugar, es una mujer lo sé por el sonido que hacen sus tacones bajos, intento levantarme nuevamente pero esta vez con más fuerza sabiendo que ya es hora de entrar en razón.

Abrí lentamente mis ojos y la luz completamente blanca del lugar es lo primero que encuentra mis ojos con demasiada potencia. Parpadee un poco para poder ver mejor donde me encontraba. El cuarto era completamente blanco, todas las cosas que se encontraban en el eran blancas o eran de metal. Gire mi mirada hacia la puerta y mis ojos se encontraron con los de la enfermera que me miraba con la boca abierta. Calcule su edad y era más o menos de 23 años, seguro que apenas estaba estudiando medicina. La joven enfermera salió corriendo y tropezando de la habitación y yo volví a cerrar los ojos, un poco agotado, esperando a que esa señorita trajera un doctor que me ayudara. Como pensaba ella no sabía qué hacer conmigo porque estaba apenas comenzando la carrera en la universidad. Espere un largo rato hasta que escuche de nuevo pasos en el cuarto que se acercaban hacia mi cama.

- ¿Señor, está despierto?- Escuche la voz gruesa de un hombre mayor que debía de ser el doctor. Quise mover mi cabeza para decir que si pero no pude, lo único que podía era mover mis parpados y estos un poco renegados se abrieron y vi al hombre que me hablaba, tenía el cabello blanco y su traje también era totalmente blanco, excepto sus guantes de goma que eran verdes. El sonrió cuando abrí los ojos y le dijo a la enfermera que trajera un poco de agua limpia.- Buenos días señor, usted se encuentra en estos momentos en un hospital, si quiere saber.- Me dio rabia ese comentario porque era obvio que ya sabía que era un maldito hospital. Algunas personas dicen y preguntan cosas muy estúpidas.- Hoy es viernes y son las 9:34 de la mañana. Usted nos ha hecho trabajar toda la noche pero gracias a Dios hicimos un excelente trabajo, usted tiene suerte de estar vivo. Si no tuviera las defensas tan fuera de lo normal altas usted estaría en este momento bajo tierra.- El doctor pensando que me tranquilizaría me sonrió pero lo único que yo quería era golpearlo por hablarme como si fuera un bebe. – Lo dejaremos solo el día de hoy para que pueda sentirse cómodo ya que despertó. Aquí hay un televisor y baño. Si necesita algo urgente presione el botón rojo que está instalado en la puerta y vendré enseguida. Que tenga una muy buena tarde.

El doctor y la enfermera salieron de la habitación pensando que yo me hiba a dormir todo el día porque tenía muy pocas fuerzas para estar por lo menos sentado, pero obviamente ellos se equivocaron, tenía todas las fuerzas conmigo porque yo no era un humano, yo era algo mucho más grande y poderoso que un insignificante humano. Trate de conectar mi cerebro con mis extremidades y dificultosamente me levante de la cama y camine hacia el baño. Encendí la luz de este y me sorprendió ver que era aun más potente que la del cuarto, parpadee un poco y luego me acerque al lava manos. Deje que mis manos se llenaran de agua y me lave muy bien la cara para poder despertarme por completo. Con mi mano derecha busque la toalla y cuando la encontré me seque las manos, el cuello y mi cara. Limpie un poco el espejo para poder ver cuál era mi estado.

Mi cara estaba tan pálida como cuando me transformaba en mi forma no humana y me cabello estaba sucio y enredado por estar un poco largo. Salí del baño y luego volví a entrar en él con unas tijeras que había olvidado la enfermera. Sin importar para qué eran las tijeras me recorte el cabello hasta que quedo de un modo aceptable, luego me lo moje y me peine hacia atrás para que no me molestara. Volví a verme al espejo y me quede viéndome a mis ojos grises sin saber qué hacer en ese momento. Casi toda mi vida había sido destruida por una confesión pero quería esperar un poco más para preguntar qué había pasado en realidad pues nunca me había gustado juzgar a alguien sin conocer las razones antes. Volví al cuarto y me recosté de nuevo en la cama que era muy incómoda, con el control prendí la televisión y comencé a pasar los canales tratando de encontrar algo que tuviera sentido pero solo estaban pasando estúpidas y cursis telenovelas. La vida ha sido una mierda conmigo durante estos últimos años.