domingo, 24 de octubre de 2010

El jardin de las flores secas. Entrega 12

Capitulo 12
(Prov. Valery)
No podía creer que estuviera haciendo todo esto por poder, territorio y oro. Era verdad lo que decía mi madre de mi vida: Yo haría lo que fuera por dinero y por eso terminaría con una vida triste.
Apenas unas horas antes me encontraba feliz, relajada y contenta en una hermosa fiesta de mascaras con mi jefe y amor de mi vida que se llama Ald y ahora me encuentro en un lugar completamente blanco con mi vestido de fiesta rojo y torturando a un hombre. Pensé que Ald me amaba pero me doy cuenta que solo me quiere por mis habilidades de guerra, es cómico como cambian de rumbo las cosas.
Mi paciencia ya se estaba acabando, este hombre, Grisel, me estaba desesperando, avían pasado dos horas y no había hablado de ninguna debilidad de la reina y necesitaba en ese momento respuestas sobre las cosas malas de madam Catalina antes de que llegara mi amor Ald y lo decepcionara.
Me mire el reflejo en un pequeño espejo que decoraba la habitación donde había amarrado a Grisel, no lo podía negar el era un hombre muy apuesto pero había algo que no me gustaba de él, su actitud de persistencia de resto todo me gustaba, sus sexis ojos grises, su cabello revuelto oscuro, su pálida tez, los músculos de su cuerpo me hacían desearlo.
- Lastima que tengas prometida.- Le dije yo secando un cuchillo de carnicero que acababa de enterrar en su muslo derecho. El mi miro con rabia a los ojos y yo me le acerque cogiendo sus mejillas.- Serias un buen partido para cualquiera, que suerte tiene la dama Catalina.- Yo suspire cansada de este juego, solo quería que termináramos de una vez para poder irme a dormir, o mejor a desayunar. Hace unas pocas horas había amanecido pero en ese lugar no se notaba la diferencia entre el día y la noche por ser una habitación bajo tierra.- Esta bien, ya me canse de este juego mesie Grisel, así que por favor hable o tendré que asesinarlo de una manera muy lenta. Para que le sea más fácil piense en su familia, usted le aria mucho daño si usted terminara muerto así que por favor comience a cantar de una vez.
- Ni ensueños, no diría nada que pudiera lastimar a mi amada. ¿Dónde está Ald? ¿Qué le está haciendo a mi prometida?- Grito tan fuerte que me hizo retroceder muy poco, aunque yo fuera humana tenia extraños dones y uno de ellos era mi fino oído que podía escuchar cualquier cosa, por eso los espectros me habían elegido a mi entre miles de humanos sin ninguna importancia.- Tengo hambre, ya verás que cuando me largue de este lugar tu serás la primera que pagara por todo esto.
- Aja, si claro Grisel, te creo, si es que acaso me encuentran o si acaso te encuentran… Vivo.- Sus ojos se abrieron más de lo normal, me encantaba su cara asustada, se veía aun más sexy, yo aria cualquier cosa para que un hombre así me amara en cuerpo y alma.- Solo tienes que decir un punto débil de ella.
- Ella no tiene ningún punto débil, es hermosa, poderosa, inteligente,…- El comenzó a decir miles de cumplidos a los que no puse cuidado, solo comencé a pensar ¿Y si estaba en lo cierto? ¿Y si Catalina en realidad no tuviera ningún punto débil? En los ojos de Grisel se notaba un brillo de amor y admiración mientras hablaba y en ese momento la respuesta se rebeló ante mis ojos y sonreí.
- Es tan claro.- Dije interrumpiéndolo y el se quedo callado.- Catalina si tiene un punto muy débil.- Me reí levemente y lo mira a sus ojos aun sonriendo dejando ver mi perfecta dentadura.- Pero si su punto débil eres tú. Siempre estuvo muy claro.- Grisel puso los ojos en blanco y trago saliva y yo me reí fuertemente en su cara- Por fin, muchas gracias querido, me has ayudado mucho, ahora puedes dormir y descansar porque ya tengo la respuesta. Esto es increíble.
El me miro con ojos suplicantes casi con lagrimas y yo riendo Salí de esa horrible sala ya manchada con sangre en lugares específicos de las paredes y el piso y tras de mi apague la luz dejando a oscuras en lugar.
(PROV. Grisel)
Estaba agotado, ya no quería hablar ni replicar a los insultos de la esbelta mujer que tenia al frente, quería dormir de nuevo junto a Catalina.
- Lastima que tengas prometida.-Dijo ella suspirando un poco ¿Pero que le pasaba? Me tortura toda una noche y aun así le gusto. Odiaba a esa mujer, cuando pensé que ella iba a parar de hacerme sufrir comenzó de nuevo a hablar.- Serias un buen partido para cualquiera, que suerte tiene la dama Catalina.- Los dos suspiramos muy cansados de la situación. Lo único que deseaba era volver a ver el rostro de Catalina sonriéndome diciéndome con sus ojos que todo estaba bien y que estaría bien. Cerré mis ojos para descansar mis parpados y los volví a abrir cuando comenzó a hablar de nuevo.- Esta bien, ya me canse de este juego mesie Grisel, así que por favor hable o tendré que asesinarlo de una manera muy lenta. Para que le sea más fácil piense en su familia, usted le aria mucho daño si usted terminara muerto así que por favor comience a cantar de una vez.
- Ni ensueños, no diría nada que pudiera lastimar a mi amada. ¿Dónde está Ald? ¿Qué le está haciendo a mi prometida?- Grite completamente desesperado, ya no aguantaba ni una hora más atado, las cuerdas alrededor de mis muñecas se estaban marcando en mi piel y la herida que esa mujer me había hecho en la pierna me ardía mas que nunca. Me daba tensión ver la sangre que se escurría lentamente por mi pantalón entrando a mis zapatos.- Tengo hambre, ya verás que cuando me largue de este lugar tú serás la primera que pagara por todo esto.
- Aja, si claro Grisel, te creo, si es que acaso me encuentran o si acaso te encuentran… Vivo.- ¿Eso qué significaba? Al fin y al cabo enserio me iban a asesinar sin importar si decía algo o no. Era lo peor que me había pasado en mi vida, peor que cuando me entere que mi amada me engañaba con un monstro porque ahora sabia que ella hiba a morir y yo también. Moví todo mi cuerpo tratando de zafarme de esa silla pero con cada movimiento las cuerdas se enterraban mas en mi piel y mis heridas dolían mucho mas.- Solo tienes que decir un punto débil de ella.
- Ella no tiene ningún punto débil, es hermosa, poderosa, inteligente, limpia, organizada, amigable, sociable, amorosa, valiente, decisiva, atlética, conocedora del mundo, increíble.- Dije todas esas cosas y suspire silenciosamente y me di cuenta que la mujer del vestido rojo había dejado de verme y estaba como en una posición pensativa ¿Había dicho algo interesante? De pronto vi como sus ojos lentamente se iluminaban pero con una luz brillante y volteo a verme.
- Es tan claro.- Dijo sonriendo y me quede tan callado como una tumba.- Catalina si tiene un punto muy débil.- se rio  y me miro a los ojos aun sonriendo dejando ver su perfecta dentadura.- Pero si su punto débil eres tú. Siempre estuvo muy claro.- Yo puse los ojos en blanco y trague saliva y ella como respuesta de mi reacción se rio fuertemente en mi cara. No podía estar pasando, ¿Ahora que más daño nos hiba a hacer?- Por fin, muchas gracias querido, me has ayudado mucho, ahora puedes dormir y descansar porque ya tengo la respuesta. Esto es increíble.
Ella camino rápido hacia una puerta de metal muy pequeña y aun sonriendo con un gesto se despidió de mi dejando la habitación en la completa oscuridad, espere a que mis ojos se acostumbraran a tanta penumbra pero no lo hicieron. ¿Acaso estoy bajo tierra? ¿Dónde estoy? De mis ojos cayeron lágrimas sin parar. No puedo negar que estaba muy asustado, ya mi cuerpo no podía soportar tanto dolor. Cerré mis ojos sin dejar de sollozar y pensé en Catalina deseando que estuviera bien. La última imagen que vi en mi mente antes de dormirme fue la de Catalina en un hermoso prado sosteniendo una pequeña criatura en sus brazos: Un bebe.

1 comentario:

  1. Me gusto mucho laintroduccion de Valery,pobre Gril,ese Ald maldito!,que lindopensamiento de Catalina ufff pobre Gril :(

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